El diputado Raúl Benítez y la exsenadora Kattya González oficializaron su ruptura con el Partido Encuentro Nacional (PEN). El parlamentario explicó los motivos y señaló cuáles son sus objetivos principales actualmente.
Indicó que todo comenzó con Fernando Camacho y su ocupación en la finca 916, del Ministerio de Defensa. Recordó que en esa ocasión solicitaron la renuncia del entonces persidente del partido y comenzaron los problemas y se crispó el ambiente.
Además, relató que uno de sus proyectos era el trabajo con los jóvenes, para formar figuras jóvenes, y consideraron que el subsidio electoral podría ser utilizado para ese fin. “Evidentemente, yo confié en la buena fe y en el buen uso de ese subsidio, pero me encontré con otra realidad”, lamentó.
Agregó que el partido está completamente “secuestrado por un gupo que lo maneja a su antojo” y que no permiten la renovación. “Buscan una figura constantemente para sostener ese subsidio electoral pero no existe esa ambición que tiene que tener un partido para un proyecto político que pueda trascender a futuro”, cuestionó.
Afirmó que Camacho sigue dominando el partido y “lo usa como si fuera suyo”, por lo cual es muy difícil construir y renovar el PEN.
El partido, no es la prioridad para Benítez
El diputado señaló que la crisis con el PEN no es su prioridad y entendió que debe trabajar en otros aspectos en este momento. “La prioridad no está ahi, sino tal vez en encontrar puntos donde nos vamos a aglutinar diversos actores de la oposición, para generar una lista conjunta”, expresó.
“Lo que tiene que primar es saber que es lo qué queremos hacer, cuál es la solucion que le vamos a ofrecer a la gente, yo creo que la gente va a elegir a un grupo donde se sienta segura (…) Tenemos que ver proyectos que trasciendan nuestros nombres, tenemos que tomar decisiones frías, bajar los egos y el humo. Hay que entender que el que dar un paso al costado, tiene que hacerlo, y no es personal”, reflexionó.