El periodista de EL PAÍS Alejandro Santos recibió el Premio Nacional de Periodismo de México por su trabajo sobre Pablo López Alavez, un líder indígena zapoteca injustamente encarcelado en Oaxaca.
El texto premiado destaca la violencia institucional contra defensores de la tierra en México, uno de los países más mortíferos para los ambientalistas.
Las condiciones inhumanas en las que vive López Alavez desde hace 13 años son denunciadas en la entrevista y fotografías de Rodrigo Oropeza.
El caso de López Alavez muestra las fallas del sistema judicial mexicano y la lucha contra la tala ilegal motivada por intereses económicos y políticos.
El reportaje de Andrea Jiménez sobre una enfermedad hereditaria en Veracruz también fue reconocido en el ámbito del periodismo científico y cultural.
Otros ganadores del premio incluyen una crónica de Marcela Turati sobre la desaparición de Alicia De los Ríos durante la Guerra Sucia en México.
Se premió también un artículo de Témoris Grecko Berumen en la categoría de Opinión y una fotografía de Rodrigo Oropeza sobre los daños causados por el huracán Otis en Acapulco.
El premio a la trayectoria fue otorgado a Soledad Durazo, una figura clave del periodismo mexicano con más de 35 años de experiencia en diferentes medios.
