Debido a que los intentos de acuerdos comerciales no están funcionando, Europa nos envía un “caballo de Troya”, un invento histórico de esa parte del mundo, que traducido al lenguaje de la calle es “un regalo mentiroso”, señala el mensaje difundido por la Unión de Gremios de la Producción (UGP).
El comunicado agrega que la cooperación financiera es siempre una ayuda no desprovista de intereses particulares, más o menos evidentes, semiocultos o claramente disimulados.
A su vez, el numeral 3 del documento propuesto para la cooperación dice: “Las asociaciones y cooperación promoverán el desarrollo de procesos integrados de ordenación del territorio de la adopción de la legislación pertinente en los países productores”.
“El problema con este tipo de regalos, como lo aprendieron los troyanos, es abrirles la puerta y, por fondos no reembolsables, a través de consultorías, incorporar a la legislación paraguaya normas diseñadas por otros países, para otras circunstancias y entornos. Avancemos, a nuestro paso, con nuestros objetivos y nuestras circunstancias”, propone la UGP.
“La UE, en el reglamento 1115, pone por escrito lo que el Senado de Estados Unidos hizo de hecho con la carne paraguaya: no importa cuanto hagas por cumplir ciertas normas, el comprador se reserva herramientas para romper un trato cerrado, cobrar multas usurarias y hacerlo sobre consideraciones no científicas, “precautorias” le llaman ellos”. advierte la UGP.
“Por las dudas, te suspendo, te prohibo, te cierro las puertas. La mayoría de los países de la UE tienen un largo historial de presiones coloniales, por decirlo de manera elegante, y no debe sorprender que sigan comportándose como lo han hecho durante mucho tiempo y en muchos lugares de la tierra. Lo que no debería suceder es que funcionarios del gobierno paraguayo desconozcan la historia y su modus operandi”, recomienda la referida organización de productores.