Tres paraguayos fueron asesinados en Ponta Porã, Brasil, en un nuevo episodio de violencia en la frontera con Pedro Juan Caballero, Departamento de Amambay.
En la tarde del jueves, se registró un ataque armado en la localidad brasileña de Ponta Porã, donde tres ciudadanos paraguayos perdieron la vida tras recibir múltiples disparos. El suceso ocurrió en la zona fronteriza, generando preocupación entre los residentes locales sobre la creciente violencia en la región.
Las víctimas fueron identificadas como Virgilio Fretes Marecos, de 29 años, y los otros dos hombres, Aldo Giménez Velázquez y Rodrigo Ramón Ferreira Barrios, ambos de 30 años. Se ha confirmado que Virgilio Fretes tenía antecedentes penales por robo agravado y contaba con prohibiciones para portar armas y consumir bebidas alcohólicas. En contraste, Giménez y Ferreira Barrios no tenían antecedentes, según información preliminar de las autoridades.
El ataque se produjo mientras las víctimas estaban almorzando en un comedor al aire libre, lo que ha despertado la atención de las fuerzas de seguridad. Según la denuncia de testigos, un grupo de desconocidos se acercó y abrió fuego sin mediar palabra, lo que llevó a un escenario caótico tras la balacera. Las investigaciones iniciales se encuentran en curso, aunque los detalles sobre el ataque y su motivación aún no han sido esclarecidos.
La violenta situación en la frontera entre Paraguay y Brasil ha sido objeto de debate en la comunidad, donde los ciudadanos exigen mayor atención y acción por parte de las autoridades. Este tipo de incidentes no solo afecta a las familias de las víctimas, sino que también impacta la seguridad general en la región, donde el comercio y la convivencia entre ambos países se ven amenazados por la criminalidad.
Las autoridades brasileñas han comenzado a recopilar indicios y testimonios que puedan conducir a la identificación de los responsables del ataque. Además, se espera que el gobierno paraguayo colabore con las investigaciones, dado que los tres fallecidos eran ciudadanos paraguayos. Sin embargo, hasta el momento, no se han realizado detenciones relacionadas con el caso.
La violencia en la frontera es una problemática recurrente, y este trágico evento pone de relieve la necesidad de estrategias efectivas que promuevan la seguridad y la mejora de las condiciones de vida en la región. Localmente, se demandan medidas preventivas y un trabajo conjunto entre las policías de Brasil y Paraguay para colaborar en la lucha contra el crimen organizado.