La lentitud en los resultados de las elecciones municipales en Inglaterra genera crisis. Rishi Sunak, primer ministro británico, enfrenta derrotas que lo debilitan ante críticas internas. La sombra de las generales está presente.
En Blackpool South, el Partido Laborista logra una victoria histórica. Chris Webb vence al conservador Scott Benton en una elección suplementaria. Este triunfo representa un mensaje claro de cambio para los conservadores de Rishi Sunak.
Los resultados municipales revelan pérdidas significativas para los conservadores. Expertos predicen que podrían perder hasta 500 de sus 1.000 concejales. John Curtice destaca que este podría ser uno de los peores resultados en 40 años para el Partido Conservador.
Richard Holden defiende a Sunak argumentando que provienen de buenos resultados en comicios anteriores. Se espera que las generales se celebren en la segunda mitad del año, probablemente en noviembre. La presión interna aumenta ante posibles elecciones anticipadas.
El Partido Laborista suma victorias simbólicas en diversos concejos. Sunak se aferra a las elecciones en West Midlands y Tees Valley, donde dos alcaldes conservadores son populares. Se espera conocer los resultados de West Midlands el sábado.
Sunak celebra la victoria de Ben Houchen en Tees Valley. Aunque Houchen obtiene el 53% de los votos, Sunak no está fuera de peligro. La oposición señala que una ventaja del 12% podría quitar a los conservadores siete escaños del Parlamento.
Los resultados en West Midlands serán clave para determinar el futuro de Sunak. Si conservan ambos escaños, el primer ministro podrá mostrar un respiro. Sin embargo, el castigo electoral apunta a un resultado cruel para los conservadores.
