Henrique Capriles Radonski renunció a la dirección de Primero Justicia, generando controversia en la oposición venezolana. Se argumentan diferencias internas y falta de transparencia. La crisis en el partido se arrastra desde el gobierno interino de Juan Guaidó.
Eudoro González, dirigente de Primero Justicia, desató tensiones al facilitar la salida del país de una persona sin informar a la organización. Capriles defendió esta acción y critica los agentes dobles en el partido. Diferencias con Julio Borges también marcan la discordia interna, especialmente en temas como las sanciones contra Venezuela.
Capriles lamenta la falta de un plan claro en la Mesa Nacional y se compromete a seguir luchando por una solución democrática en Venezuela. Su salida de la dirección refleja una profunda crisis interna en Primero Justicia, con intervención del régimen. La renuncia de Capriles revela un cisma en el partido, con repercusiones en la oposición venezolana.