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El Congreso de Perú votará sobre declaración controvertida de Sheinbaum.

El Congreso de Perú votará sobre declaración controvertida de Sheinbaum.

Crisis Diplomática entre México y Perú: Una Tensión Creciente

La reciente escalada de tensiones entre México y Perú ha generado un impacto significativo en la política internacional, al provocar la aprobación de una moción en el Congreso peruano que busca declarar a la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, como "persona no grata". La medida se refiere a la controversia en torno al ex presidente peruano, Pedro Castillo, quien ha estado en prisión desde diciembre de 2022.

La moción fue aprobada el lunes por la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso peruano con 12 votos a favor y 6 en contra. Los legisladores expresaron su preocupación por lo que consideran una “interferencia inaceptable” de Sheinbaum en los asuntos internos de Perú, así como una postura "hostil" hacia el gobierno de Dina Boluarte. Se argumentó que el apoyo de la presidenta mexicana hacia Castillo, a quien se refiere como el "presidente legítimo de Perú", es sumamente provocativo y carece de la prudencia diplomática necesaria.

Se recuerda que las relaciones entre los dos países se deterioraron after Castillo intentó asilarse en la Embajada de México en Lima, tras un fallido autogolpe en diciembre de 2022. En este contexto, el ex presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador también ha hecho comentarios despectivos hacia Boluarte, lo que ha contribuido a la creciente desavenencia.

Claudia Sheinbaum se ha presentado como una firme defensora de Castillo y ha expresado su solidaridad a través de encuentros con su abogado, Guido Croxatto. Este último, en declaraciones previas, subrayó que el caso de Castillo es un "precedente grave" en la persecución política en la región, y pidió a la comunidad internacional, incluida la ONU, que intercediera por su libertad. Estas declaraciones han provocado un aumento de las tensiones entre Lima y la Ciudad de México, con ambas naciones enfrentando la crítica del otro.

A mediados de 2023, la animosidad entre ambos países se intensificó. En mayo, el Congreso peruano aprobó una moción similar que pedía al Ministerio del Interior que impidiera la entrada de figuras contrarias a López Obrador. Esta situación se sincronizó con la solicitud de asilo de la familia de Castillo en México, lo que se interpretó como un acto hostil hacia el gobierno peruano.

Los conflictos se han entrelazado en un contexto más amplio de amenazas y hostigamiento. Recientemente, el consulado peruano recibió una llamada anónima con amenazas de represalias, lo que generó aún más alarma. En la comunicación, se advertía de una posible "extradición en bolsas de basura", lo que ilustraba la gravedad de los sentimientos anti mexicanos que se han manifestado en Perú en respuesta a la postura de Sheinbaum.

El conflicto se intensificó aún más en 2024 cuando México reinstauró el requisito de visa para los ciudadanos peruanos, algo que había sido eliminado en 2012. Esta medida fue contestada rápidamente por el gobierno peruano, lo que llevó a una escalada verbal entre ambos países. Sin embargo, el decreto de visa fue retirado pocos días después, lo que generó confusión sobre la postura definitiva de México.

El momento culminante de esta crisis diplomática se dio con la reciente reunión entre Sheinbaum y Croxatto, lo que destaca la crisis política que ha estado ocurriendo durante casi tres años. Los fiscales peruanos han solicitado una condena de 34 años de prisión para Castillo, mientras que la propuesta de declarar a Sheinbaum "persona no grata" se discutirá en el Parlamento en las próximas semanas. Así, las tensiones entre México y Perú continúan, sin visos de solución a un conflicto que parecía estar en el centro de una lucha más amplia por la democracia y la soberanía en América Latina.

Estas tensiones han llevado a analistas políticos a observar que la crisis no solo afecta las relaciones bilaterales sino que también podría tener repercusiones en otros países de la región, que observan con inquietud cómo se desarrollan estos eventos. La política en América Latina a menudo refleja divisiones más amplias, y la situación actual podría ser un catalizador para una mayor fragmentación entre gobernantes de distintos matices ideológicos.

En conclusión, la crisis entre México y Perú se ha profundizado, evidenciando la fragilidad de las relaciones diplomáticas en un mundo cada vez más polarizado. Con mociones que amenazan el protocolo diplomático y situaciones de violencia que complican aún más el escenario, los próximos meses serán clave para determinar si ambos países pueden encontrar un camino hacia la reconciliación o si, por el contrario, se intensificará la confrontación política.

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