La Fiesta de la Virgen de Itacuá, en la Solemnidad de la Inmaculada Concepción de María 2024, se desarrolló este domingo 8 de diciembre con una masiva peregrinación, procesión náutica y la misa central presidida por el obispo de Encarnación, Monseñor Francisco Javier Pistilli Scorzara. La agenda de actividades se llevó a cabo a pesar del temor de los organizadores ante la inestabilidad climática y el miedo causado por las intensas tormentas que azotaron al departamento durante el sábado.
Sobre la realidad actual se limitó a decir: “No voy a enumerar los defectos y males de nuestra sociedad, que todos conocemos. Existen, son reales. Pero si les vuelvo a invitar y a exhortar: levantemos en alto la esperanza cristiana, como lo hizo la Virgen, como Iglesia de Cristo”. No obstante, señaló que “hay semillas del Reino, hay semillas del mal, pero solamente una prevalece: el Reino de Dios”.
Procesión náutica
Las embarcaciones con la imagen de la Virgen peregrina partieron a las 6:30 desde el puerto del Club de Caza y Pesca de Pacucuá, en aguas del río Paraná, con destino a la gruta de la Virgen, donde llegaron cerca de las 6:50. La comitiva fue recibida por la Banda Santa Rosa de la ciudad de Encarnación.
Con los años, se construyó una capilla y la veneración creció hasta convertirse en el mayor centro mariano del sur del Paraguay. El santuario, construido en un predio de tres hectáreas, es actualmente destino de miles de fieles que llenan el sitio en los días festivos. Se encuentra en la saliente de tierra llamada “Punta Itacuá”, ubicada a nueve kilómetros al sudeste del casco céntrico de la ciudad de Encarnación.