El Producto Interno Bruto (PIB) cerró el 2023 con un crecimiento del 4,7%, superior a lo estimado en diciembre último de 4,5%. Esto debido a un mejor desempeño de lo esperado en la última parte del año, donde se destacaron desempeños de la ganadería, industrias, servicios y energía, según datos del BCP.
No obstante, la expansión que registró nuestra economía no es de un efecto de los últimos meses como quiere hacer creer este gobierno, sino que se debe en parte al rebote estadístico y recuperación de sectores que fueron muy afectados en el año 2022 por la sequía (agricultura y sector energético), como también por la recuperación de actividades que quedaron muy relegadas tras el impacto de la pandemia (industrias y servicios).
Según los datos oficiales, el PIB registró en un el último trimestre del 2023 (octubre a diciembre) un crecimiento de 4,9% y con este resultado cerró con una expansión final del 4,7% en todo el año. Pero lo más destacado es que principalmente el repunte en el cuarto trimestre se dio en sectores como servicios, industrias y ganadería. El PIB sin considerar la agricultura y binacionales creció 5,8%.
Desde el enfoque de la producción, la agricultura registró una caída de 5,8% en el cuarto trimestre por menores niveles de producción de maíz, trigo, girasol y tabaco. No obstante, el 2023 cierra con un importante crecimiento acumulado de 23,3% debido, principalmente, a la mayor producción de soja, arroz, caña de azúcar, mandioca, sésamo, yerba mate y canola.
Repunte en industrias
Las actividades que incidieron positivamente en el cuarto trimestre fueron la producción de aceites, carnes, molinerías y panaderías, lácteos, bebidas y tabacos, textiles y prendas de vestir, cueros y calzados, maderas, químicos, fabricación de metales comunes, maquinarias y equipos, entre otros.
Construcción sigue en baja
Finalmente, el sector servicios creció 5,2% en la última parte del año, acumulando así un crecimiento de 3,6% al cierre del 2023.
