El Congreso argentino revierte el ajuste en las universidades públicas impuesto por el Gobierno de Milei. La Ley de Financiamiento Universitario, aprobada por 57 votos a favor en el Senado, busca reconstruir el presupuesto del sistema educativo y los salarios de docentes.
Organizaciones sindicales y estudiantiles, junto con autoridades académicas, celebran la aprobación de la ley que restituirá fondos a las 57 universidades nacionales. El sistema universitario ha sufrido una disminución del 31,5% en su presupuesto y un 33,3% en el poder adquisitivo de los salarios de los trabajadores.
La normativa declara emergencia presupuestaria para las universidades en 2024 y establece criterios de actualización de acuerdo con la inflación acumulada. Legisladores de diferentes partidos políticos apoyaron la ley, mientras que los representantes del partido de Milei expresaron su oposición.
El Gobierno de Milei planea vetar la Ley de Financiamiento Universitario, argumentando preocupaciones sobre el equilibrio fiscal. El Congreso también debate la implementación del voto único en función de una reforma electoral. La jornada legislativa se extendió hasta altas horas de la madrugada.
El apoyo mayoritario en el Senado a la ley de financiamiento universitario representa un desafío para el Gobierno de Milei. La medida generaría un gasto del 0,14% del PIB, pero algunos expertos consideran que es comparable a las exenciones fiscales otorgadas a los sectores más ricos del país.
El Presidente de Argentina, Javier Milei, enfrenta resistencia en el Congreso ante su ajuste presupuestario en las universidades públicas. La Ley de Financiamiento Universitario representa un paso importante para la recuperación de fondos perdidos en el sistema educativo.
El debate parlamentario refleja la lucha por la supervivencia del sistema universitario público en Argentina. La oposición al Gobierno de Milei se une en la defensa de la educación superior y critica las políticas de ajuste que afectan a millones de jóvenes en el país.
La Ley de Financiamiento Universitario es un mensaje claro del Poder Legislativo al Ejecutivo para reconstruir el presupuesto y los salarios en las universidades. Las negociaciones y los vetos presidenciales marcan un capítulo crucial en la relación entre el Gobierno y el Congreso en Argentina.