El presidente de Irán, Ebrahim Raisi, falleció en un accidente de helicóptero. También perdió la vida su ministro de Asuntos Exteriores, Hossein Amir Abdollahian, en la provincia iraní de Azerbaiyán Oriental. La aeronave se estrelló en una zona montañosa y de difícil acceso.
La noticia fue confirmada por el Gobierno iraní, que informó que ninguna de las ocho personas a bordo sobrevivió. Otros dos helicópteros de la delegación presidencial no sufrieron contratiempos. Las causas del accidente aún son desconocidas, aunque se atribuyen a las condiciones meteorológicas adversas.
El Gobierno de Irán ya ha tomado medidas tras el fallecimiento del presidente. Mohamad Mojber, vicepresidente primero hasta el momento, asumirá el liderazgo del Ejecutivo. Se espera que organice elecciones presidenciales en un plazo de 50 días. Mojber es considerado un estrecho colaborador del líder supremo iraní, Ali Jamenei.
El Ministro de Asuntos Exteriores, Ali Bagheri Kani, fue designado como jefe interino de esa cartera. El Líder Supremo Ali Jamenei expresó sus condolencias por la pérdida de Raisi y declaró cinco días de luto público en Irán. Diversos países y organismos internacionales también rindieron homenaje al mandatario fallecido.
El accidente tuvo lugar cuando el helicóptero retornaba de una visita oficial en Azerbaiyán Oriental. Raisi había participado en la inauguración de dos presas en la región. La aeronave, un Bell 212 de fabricación estadounidense, transportaba a varios funcionarios de alto rango, incluido el presidente, ministros y personal de seguridad.
Irán desplegó una operación de búsqueda y rescate con la colaboración de la Media Luna Roja y otras instituciones. El país contó también con apoyo de Turquía, Irak y la Unión Europea. A pesar del esfuerzo, el helicóptero fue encontrado completamente destruido. El Líder Supremo pidió calma a la población tras el trágico suceso.
Ebrahim Raisi, una figura controvertida en la política iraní, ha sido descrito como un defensor del régimen y ha enfrentado críticas por su línea dura. Su ministro de Asuntos Exteriores, Hossein Amir Abdollahian, también era una figura influyente en la diplomacia de Irán. Sus vínculos con grupos de resistencia lo convirtieron en una figura destacada en la región.
La muerte de Raisi y Abdollahian deja un vacío en la política iraní y en las relaciones internacionales del país. La tragedia ha generado muestras de solidaridad y condolencias a nivel mundial. Irán deberá enfrentar un nuevo escenario político tras la pérdida de su presidente y ministro de Exteriores.
