Philips llegó a un acuerdo por 1.100 millones de dólares para cubrir reclamaciones en EE. UU. relacionadas con dispositivos defectuosos, que incluyen respiradores con espuma de poliuretano. La empresa holandesa no admite problemas médicos, pero se acoge al acuerdo para resolver la disputa, tras retirar 5.5 millones de unidades en todo el mundo desde 2021.
Los pacientes afectados ahora indemnizados en EE. UU. afirman haber enfermado por el uso de los dispositivos. La espuma de los respiradores atenuaba el ruido, pero sus partículas podrían inhalarse o tragarse. La FDA de EE. UU. señala que complicaciones de la espuma pueden empeorar con ciertos métodos de limpieza no recomendados.
Philips llevaba años enfrentando las consecuencias de la retirada de los dispositivos, con informes de muertes relacionadas. El acuerdo de 1.100 millones de dólares incluye el pago de 982 millones de euros este trimestre, con la empresa reservando fondos para indemnizaciones. La reacción de los inversores fue positiva, con las acciones de Philips subiendo un 45% el lunes.
La empresa continúa ofreciendo servicios relacionados con la apnea del sueño. También informó sobre correcciones necesarias en otro modelo de respiradores utilizado en hospitales. A pesar de las pérdidas operativas debido al litigio en EE. UU., las ventas del grupo aumentaron un 2.4% en términos comparables. La empresa busca superar los desafíos y continuar brindando sus servicios.