La Comisión Ambiental de la Megalópolis suspendió la contingencia ambiental por contaminación del aire en la región metropolitana. La medida se levantó debido a la disminución de concentraciones de ozono, condiciones meteorológicas favorables y estándares de calidad del aire en nivel operativo.
Se atribuyen los altos niveles de ozono al sistema de alta presión que ha provocado altas temperaturas y falta de viento, generando la décima contingencia del año. La CAMe estará monitoreando la calidad del aire y condiciones meteorológicas.
La contaminación persistió debido a la influencia del sistema de alta presión en el Valle de México, provocando mala ventilación, estabilidad atmosférica e intensa radiación solar. La principal preocupación son los vehículos, considerados como el mayor contaminante. Las restricciones al tráfico son insuficientes para detener la mala calidad del aire.
La CAMe emite recomendaciones para prevenir la exposición al público, recomendando evitar actividades al aire libre en ciertas horas, repostar gasolina en horarios específicos y reducir el uso de aerosoles. La mala calidad del aire es un problema grave en el Valle de México, con consecuencias para la salud pública.
En 2024, la capital y municipios conurbados del Estado de México tuvieron buena calidad de aire solo uno de cada siete días. La contaminación atmosférica, un problema silencioso, causa entre 8,000 y 14,000 muertes prematuras al año, según la OMS. La situación requiere medidas urgentes para proteger la salud de la población.
