La sala de espera de Urgencias Pediátricas del Hospital General Barrio Obrero quedó inundada tras las lluvias del domingo. La presidenta del Sindicato de Médicos, Rossana González, exigió soluciones urgentes y denunció el abandono del centro asistencial.
“El hospital debiera ser un lugar seguro para los pacientes que acuden, más aún para los niños. No puede entrar agua proveniente de la calle ni tampoco debieran chorrear los techos, como hoy ocurre incluso en la sala de internación de Pediatría”, expresó González en su publicación.
Sectores siguen inhabilitados
Además, denunció que la sala de partos y la unidad de terapia neonatal del centro hospitalario siguen inhabilitadas desde hace casi un año, y que la habilitación está pendiente solo por la conexión del sistema de oxígeno.
“Urge la habilitación y la corrección de estas situaciones que se dan con las lluvias fuertes hace años, pero que no se debiera normalizar nunca”, remarcó.
En su mensaje, González también instó al Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPBS) a gestionar presupuesto ante Hacienda para las reparaciones necesarias, pero advirtió que las obras deben ser realizadas por profesionales capacitados y no a través de improvisaciones. “No olviden los techos de internación de Pediatría”, subrayó.